¿Dia de fiesta? - "Presidents Day"
Es tan gracioso que los días para celebrar algo importante, se decide no trabajar. ¡Cómo si el trabajo fuése el peor castigo imaginable y un día de asueto la recompensa tan anhelada!
No es ninguna razón cósmica que el último artículo de este blog como tal, lo haya decidido dedicar a uno de los temas que más me apasionan. Hoy se celebra el Día de Presidentes en EEUU, y eso no tiene ninguna relación con que mi fecha de nacimiento este a 24 horas de distancia. Aunque me encanta asociar la coincidencia de ambas fechas con algún designio especial.
“Everything rises and falls on leadership” es una proclamación de John Maxwell, autor del último libro que leí completo. Una traducción aproximada sería: “todo se levanta y cae por liderazgo”. Hasta ahora, estoy 100% de acuerdo. "Todo se levanta y cae por liderazgo" aún las grandes naciones... o quizá, a pesar de las naciones.
Sueño con descubrir cuál o cuales son las razones por las que mi país y el de mi esposa así como todos los que hablamos este mismo idioma pertenecemos al mal llamado "tercer mundo". Con tanta gente esforzada y trabajadora, con tantos recursos naturales y ventajas naturales... ¿por qué... por qué estamos como estamos? Pero lo que más sueño y más me quita el sueño es el sueño de poder algún día contribuir haciendo algo para que las cosas cambien... no sólo para mi familia, sino para algunos otros connacionales. Y a veces pienso que es un sueño absurdo, pero me convence la idea que más absurdo es no hacer nada por intentar avanzar en el camino de mis sueños. Y por eso, quiero empezar persiguiendo las respuestas, para encontrar cada vez, mejores preguntas.
George Washington, primer Presidente de la historia del mundo, nació un 22 de Febrero. Abraham Lincoln, primer Presidente republicano (¡si el pobre supiera!) nació un 12 de Febrero. Hace ya doscientos años se inició la celebración del cumpleaños de Geroge Washington y luego se busco unir en uno la celebración de ambos cumpleaños. Finalmente, se decidió establecer el tercer lunes de Febrero para dar a los empleados federales (y bancarios) un fin de semana largo, además de sancionarlo como un día en honor a todos los presidentes de esta nación.
Querramos o no Estados Unidos ha sido por las últimas dos décadas la única superpotencia. Y en los dos siglos anteriores ha logrado muchísimo como nación, gracias no a todos los que ella habitan, sino gracias a su liderazgo. El liderazgo de aquellos que han cabalgado la democracia para saltar las cercas de la elección popular y alcanzar el cetro de la toma de decisiones. El liderazgo de los grandes hombres (y mujeres que les acompañan) al servicio de su país.
Es interesante observar como en las escuelas públicas y privadas todos los niños participan en actividades alusivas al Día de Presidentes. Seleccionando, investigando, dramatizando y aún analizando presidentes favoritos y menos preferidos, pero adquiriendo consciencia crítica sobre la responsabilidad que estos personajes han tenido en la construcción de la historia del país en el cual viven ahora, y al que millones anhelan llegar.
Y aunque se tienen listados, estadísticas, cifras, datos, y opiniones para establecer de buenos Presidentes a menos buenos, e incluso un par de malos, a todos se les respeta no por sus características personales, sino por el puesto oficial que ocuparon.
Y yo me pregunto ¿que haríamos los latinoamericanos si tuvieramos un día en nuestros países para celebrar a nuestros presidentes? Si en Guatemala debieramos estudiar a Portillo, Serrano, Berger, Cerezo, Lucas.... Si en Venezuela debieramos recordar a Pérez, Caldera; en Colombia a Samper, Pastrana, Barco; en Perú a García, Toledo; a Collor en Brazil; Alfonsín y Videla en Argentina; Pinochet y Allende en Chile; Torrijos y Noriega en Panamá; en México a Salinas y de la Madrid; en El Salvador a Duarte y Cristiani; en Dominicana a Balaguer y Fernández; en cada país, personajes que inspiran división y lamentos. Lo más probable es que dedicaríamos el día a burlarnos en chistes y bromas simplonas sobre lo que no hicieron bien... y avergonzarnos de los líderes nacionales que hemos tenido. Peor aún, muchos de los mismos Presidentes de la Repóblica, se dedicarían a manchar el honor de un cargo de Servicio tan importante.
¿Estará ahí la diferencia entre ser primer mundo y subdesarrollados? ¿En la calidad de nuestros líderes? ¿En qué nuestros mismos líderes no respetan su posición sagrada como políticos preminentes y dan el ejemplo para que nadie más en el pueblo respete?
Lo que sí sé, es que me encantaría vivir en cualquier momento en un país con Presidentes como Lincoln, T. Roosevelt, Truman, Kennedy, Chávez, Arzú, Uribe, Fujimori, Allende, Torrijos, Zedillo, Jefferson, Washington, F.Roosevelt y Wilson. Y con mucha alegría celebraría más de un día al año, y no pararía de escribir en su honor.
No es ninguna razón cósmica que el último artículo de este blog como tal, lo haya decidido dedicar a uno de los temas que más me apasionan. Hoy se celebra el Día de Presidentes en EEUU, y eso no tiene ninguna relación con que mi fecha de nacimiento este a 24 horas de distancia. Aunque me encanta asociar la coincidencia de ambas fechas con algún designio especial.
“Everything rises and falls on leadership” es una proclamación de John Maxwell, autor del último libro que leí completo. Una traducción aproximada sería: “todo se levanta y cae por liderazgo”. Hasta ahora, estoy 100% de acuerdo. "Todo se levanta y cae por liderazgo" aún las grandes naciones... o quizá, a pesar de las naciones.
Sueño con descubrir cuál o cuales son las razones por las que mi país y el de mi esposa así como todos los que hablamos este mismo idioma pertenecemos al mal llamado "tercer mundo". Con tanta gente esforzada y trabajadora, con tantos recursos naturales y ventajas naturales... ¿por qué... por qué estamos como estamos? Pero lo que más sueño y más me quita el sueño es el sueño de poder algún día contribuir haciendo algo para que las cosas cambien... no sólo para mi familia, sino para algunos otros connacionales. Y a veces pienso que es un sueño absurdo, pero me convence la idea que más absurdo es no hacer nada por intentar avanzar en el camino de mis sueños. Y por eso, quiero empezar persiguiendo las respuestas, para encontrar cada vez, mejores preguntas.
George Washington, primer Presidente de la historia del mundo, nació un 22 de Febrero. Abraham Lincoln, primer Presidente republicano (¡si el pobre supiera!) nació un 12 de Febrero. Hace ya doscientos años se inició la celebración del cumpleaños de Geroge Washington y luego se busco unir en uno la celebración de ambos cumpleaños. Finalmente, se decidió establecer el tercer lunes de Febrero para dar a los empleados federales (y bancarios) un fin de semana largo, además de sancionarlo como un día en honor a todos los presidentes de esta nación.
Querramos o no Estados Unidos ha sido por las últimas dos décadas la única superpotencia. Y en los dos siglos anteriores ha logrado muchísimo como nación, gracias no a todos los que ella habitan, sino gracias a su liderazgo. El liderazgo de aquellos que han cabalgado la democracia para saltar las cercas de la elección popular y alcanzar el cetro de la toma de decisiones. El liderazgo de los grandes hombres (y mujeres que les acompañan) al servicio de su país.
Es interesante observar como en las escuelas públicas y privadas todos los niños participan en actividades alusivas al Día de Presidentes. Seleccionando, investigando, dramatizando y aún analizando presidentes favoritos y menos preferidos, pero adquiriendo consciencia crítica sobre la responsabilidad que estos personajes han tenido en la construcción de la historia del país en el cual viven ahora, y al que millones anhelan llegar.
Y aunque se tienen listados, estadísticas, cifras, datos, y opiniones para establecer de buenos Presidentes a menos buenos, e incluso un par de malos, a todos se les respeta no por sus características personales, sino por el puesto oficial que ocuparon.
Y yo me pregunto ¿que haríamos los latinoamericanos si tuvieramos un día en nuestros países para celebrar a nuestros presidentes? Si en Guatemala debieramos estudiar a Portillo, Serrano, Berger, Cerezo, Lucas.... Si en Venezuela debieramos recordar a Pérez, Caldera; en Colombia a Samper, Pastrana, Barco; en Perú a García, Toledo; a Collor en Brazil; Alfonsín y Videla en Argentina; Pinochet y Allende en Chile; Torrijos y Noriega en Panamá; en México a Salinas y de la Madrid; en El Salvador a Duarte y Cristiani; en Dominicana a Balaguer y Fernández; en cada país, personajes que inspiran división y lamentos. Lo más probable es que dedicaríamos el día a burlarnos en chistes y bromas simplonas sobre lo que no hicieron bien... y avergonzarnos de los líderes nacionales que hemos tenido. Peor aún, muchos de los mismos Presidentes de la Repóblica, se dedicarían a manchar el honor de un cargo de Servicio tan importante.
¿Estará ahí la diferencia entre ser primer mundo y subdesarrollados? ¿En la calidad de nuestros líderes? ¿En qué nuestros mismos líderes no respetan su posición sagrada como políticos preminentes y dan el ejemplo para que nadie más en el pueblo respete?
Lo que sí sé, es que me encantaría vivir en cualquier momento en un país con Presidentes como Lincoln, T. Roosevelt, Truman, Kennedy, Chávez, Arzú, Uribe, Fujimori, Allende, Torrijos, Zedillo, Jefferson, Washington, F.Roosevelt y Wilson. Y con mucha alegría celebraría más de un día al año, y no pararía de escribir en su honor.
Labels: gringadas, Politica, reflexiones
posted by soyChapin at 10:50 PM
3 Comments:
Haces un muy bien punto. Tal vez no es la unica razon, pero si una de ellas. No lo habia pensando antes, pero si, nosotros los latinos no respetamos a nuestros "ex-presidentes". Ni los estudiamos, ni nada por el estilo. Solo criticas, y no constructivas precisamente. Lastima.
Aunque no creo que se deba respetar SOLO POR QUE SI... pero el problema quiza no es la falta de respeto de los latinos, el problema es la falta de respeto de quienes alcanzan el puesto y no actuan como buenos lideres, ni buenos presidentes.
Que se me hace que me escribiste metirillas... estoy casi seguro que en vez de "vivir" en el pais preferirias TRABAJAR con un jefe Uribe... ¿o no?
En cuanto a los dias festivos.. en parte tienes razon, por eso lo mas bacan es poder trabajar en lo que a uno le encanta hacer, sea dia festivo o no...
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